Hasta ahora, las soluciones más habituales para combatir el reflujo esofágico se basan cambios en el estilo de vida, pero surgen más alternativas
El reflujo esofágico, también conocido como enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), es una condición en la cual los ácidos del estómago regresan hacia el esófago, causando síntomas como mal aliento, acidez, ardor en el pecho y distensión abdominal. Quienes lo padecen saben las molestias que puede causarles en su día a día. Pero, ¿por qué se produce? “Las causas del reflujo esofágico pueden variar, pero generalmente se debe a un mal funcionamiento del esfínter esofágico inferior (EEI), que es el músculo que se encuentra entre el esófago y el estómago, actuando a modo de válvula que evita que los ácidos del estómago asciendan. En muchas ocasiones, esa alteración en el funcionamiento del esfínter se acompaña de la existencia de una hernia hiatal”, nos detalla el doctor Santos Jiménez de los Galanes Marchán, cirujano digestivo en el Hospital Ruber Internacional de Madrid.
Personas con un mayor riesgo de padecer este problema
Le planteamos al especialista si hay personas con un mayor riesgo de padecer este problema, si existen determinados factores de riesgo. “Efectivamente, hay ciertos condicionantes que predisponen al desarrollo de esta alteración. Es más frecuente en personas que tienen sobrepeso, fuman, consumen alcohol en exceso, tienen hernia de hiato o toman ciertos medicamentos”, nos confirma el doctor.
Cómo tratar este problema de salud
Una vez que se confirma el diagnóstico de este problema de salud, nos planteamos cuáles son las soluciones más habituales para combatirlo hasta este momento. El doctor nos confirma que, hasta ahora, las soluciones más habituales para combatir el reflujo esofágico incluyen cambios en el estilo de vida, como evitar alimentos y bebidas desencadenantes, perder peso si es necesario, elevar la cabeza de la cama al dormir y tomar medicamentos para reducir la producción de ácido.
El papel de la cirugía
Pero como en todos los campos de la medicina, sigue habiendo avances para conseguir mejorar la calidad de vida de los pacientes con este problema de salud. Y una de las alternativas es quirúrgica. ¿De qué forma puede ayudarnos la cirugía mínimamente invasiva a solucionar la sintomatología del reflujo esofágico? “La cirugía laparoscópica, y más recientemente la cirugía robótica asistida por Da Vinci, es una opción para solucionar la sintomatología del reflujo esofágico. Este procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo se realiza a través de pequeñas incisiones en el abdomen, utilizando una cámara y unos instrumentos especiales para corregir el mal funcionamiento del esfínter esofágico inferior”, argumenta el doctor, al que le preguntamos por los detalles de este procedimiento quirúrgico.
“La intervención consiste en crear una nueva válvula entre esófago y estómago, realizando una funduplicatura, envolviendo el fundus -que es la parte superior del estómago- alrededor del esófago para reforzar el esfínter esofágico inferior y prevenir el reflujo de ácido”, nos detalla. Y añade que la recuperación tras una cirugía laparoscópica, y más aún si se realiza por vía robótica, es más rápida y menos dolorosa que la cirugía tradicional. “En promedio, los pacientes pueden regresar a sus actividades habituales dentro de la primera semana postoperatoria y experimentar una mejora significativa en los síntomas del reflujo esofágico en las primeras 24 horas tras la cirugía”, nos detalla.
¿En qué casos está recomendada la cirugía?
Por último, nos planteamos si estamos ante una buena alternativa para todos los pacientes o solo está indicada en algunos casos concretos. En opinión del doctor Jiménez de los Galanes, la cirugía para el tratamiento del reflujo esofágico es una magnífica alternativa para pacientes con una clara indicación, siempre tras una valoración individualizada y personalizada. “Se debe evaluar la gravedad de los síntomas, la respuesta al tratamiento médico y otros factores, como los hábitos dietéticos o la actividad física. Es fundamental comentar la situación de cada paciente con un especialista en cirugía digestiva para determinar la mejor opción de tratamiento en cada caso”, concluye el cirujano digestivo.